He de reconocer que nunca he visto un episodio entero de El Barco, he sido incapaz. Solamente he aguantado verlo a ratos, a trozos o por internet. Lo absurdo de sus argumentos, lo penoso de las actuaciones y la ilógica que rodea todo el tejido de la serie hace que mi neurona chirrie y se queje.
Pero empecemos desde el principio...
¿Que es El Barco?
Un buque escuela llamado Estrella Polar, para hacernos una idea, el nombre autentico del barco que vemos es Cervantes Saavedra, un bergantín-goleta mas bien pequeñito de 48.5 m de eslora y capacidad para 47 personas cómodamente instaladas.
Están de viaje y todo parece perfecto, cuando una gigantesca tormenta se desata. Las posibilidades de supervivencia de un barquito como este tenderían a cero, pero por alguna razón la única profesora del barco, doctora, científica, piloto, bióloga, experta en venenos, física y un larguisimo etc. Sabe perfectamente que está ocurriendo y le da al capitán Chanquete (que por alguna razón viaja con sus dos hijas) unas coordenadas muy concretas donde estarán a salvo.
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| Capitán mom capitán |
Y efectivamente pasa la tormenta y el Estrella Polar se libra del desastre, sin ni tan siquiera un palo roto ni nada. Dos como estos y la Armada Invencible se come a los ingleses con pescado y patatas.
La multi genio del barco reune a la tripulación (compuesta únicamente por el Capitán Chanquete, el Primer Oficial Charly y una cocinera, - que por cierto es la única que no está buena de a bordo - , aparte de la susudicha genia) y les comunica que el mundo se ha acabado. Resulta que el famoso acelerador de partículas LHC de al ser puesto en marcha a creado un bujero negro y a consumido el mundo. O al menos el mundo terrestre, ya que al parecer el agua sigue aquí. Menos mal que nuestra profe multiusos sabía de todo esto y les pudo poner a salvo, que pena que siendo tan lista no estaba dándoles una colleja a los científicos del LHC para que no acabaran con el mundo.
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| Cúreme doctora |
Ante tan trágica noticia naturalmente se impone un duro luto por todos los familiares, amigos, mujeres, maridos y novias perdidos....
Que no, que es broma! Siguen tan tranquilos y se dedican a follar por las esquinas.
Pero lo que si hacen es concienciarse de la grave situación por la que están pasando, sin nuevos víveres, agua potable, gasoil... y deciden apagar todas las máquinas que no sean indispensables y elaborar un estricto plan de racionamiento.
Que no, que es broma! Mantienen todas las luces encendidas, se van a la cocina cuando les da la gana y siguen vistiéndose con impecables ropas blancas.
La lista de chorradas y disparates de esta serie es tan larga cómo el número de minutos emitidos, barriendo incluso a su antecesora El Internado. Colegio de lujo para niños pijos donde una cría de 8 años salia y entraba a las tantas de la madrugada y a nadie se le ocurría poner una puta alarma.
Por poner sólo un ejemplo, en un episodio la hija mayor del Capi se va a vivir con el siniestro oficial del Estrella Polar, un tío que cojea solo a ratos y que tiene una pinta de malo cabrón que asusta. Pero a la niña pija le van los chavalotes malos y se va con el a vivir. Tiene una conversación seria con su papi, se despide de su amiga (con la cual se acaba peleando) y se tira el resto del episodio paseando la maleta por todo el puto barco. Si, por si se nos había olvidado sigue siendo un barco, y no un portaaviones precisamente.
Vamos a ver so gilipollas, que te vas a mudar a 5 metros de tu camarote. Deja ya de hacer la pamplina y de pasear la maleta.
Pues como eso, todo.
Otro momento absurdo.
El cura, el tonto y el payaso del barco descubren el diario de un antiguo capitán del Estrella Polar, (despedid al servicio de limpieza YA) naturalmente en lugar de leerlo de golpe lo van leyendo a ratos para así irse llevando reveladoras sorpresas de poquito a poquito. Así descubren un camarote fantasma que no figura en los planos actuales del barco. Dentro del camarote ni mas ni menos que media docena de esqueletos, victimas de la Gripe Española, entre ellos el mismo capitán. Que por alguna razón había decidido que la mejor forma de proteger a la población y parar la epidemia era emparedarse junto con todos los infectados en un camarote, el 33 (si, actualmente siguen numerados desde el 1 al 32).
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| Soy el hermano malo de Darth Vader |
Pero vamos, que lo estúpido del argumento no es que el capitán dejara escondido su diario en lugar de dejar que lo encontraran las autoridades que sabrían tratar con la epidemia. Ni tampoco que nadie en 50 años se diera cuenta que faltaba un trozo de barco, o que detrás de la pared olía un poco "raro". No, lo mas estúpido del argumento es que los tres gilipollas estos iban buscando un tesoro de ORO.
Pero vamos a ver, de verdad. Que cojones ibais a hacer con un montón de oro o diamantes??!! Que sois los únicos que quedáis en el planeta so imbéciles. Es infinitamente mas valiosa la Coca Cola que el chulito sin mangas se saca continuamente que un millón de kilos de oro.
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| Que bueno que estoy |
En fin, cada momento es impagable, irreal, absurdo. Todavía si se dejaran de pajaras seudocientificas y aceptaran que la tormenta les llevó a un mundo interdimensional donde las leyes de la física (y la lógica) son mas flexibles, pues vale. Me lo trago, seguirían siendo gilipollas, pero al menos explicaría como es posible que se duchen cada día (en duchas mixtas, por cierto) tengan combustible para mantener las luces y demás aparatos encendidos, comida, fruta... y que el barco por dentro sea 10 veces mas grande que por fuera.
Lo mejor de la serie.
Sus argumentos delirantes.
Lo peor de la serie.
Su carencia de lógica, los clichés y la puta niña pequeña que es insoportable.
No mas niños en Televisión!
